Montilla-Moriles se enfrenta a una vendimia complicada debido a la sequía y las altas temperaturas, mientras que en Jerez las perspectivas son más prometedoras. La vendimia de la uva Pedro Ximénez en Montilla-Moriles se espera que comience en una semana con una reducción del 30% en comparación con el año anterior. En Jerez, la vendimia de la uva palomino comenzará en la segunda semana de agosto. Los viñedos de Jerez muestran una mayor resistencia a la sequía y el calor, gracias a las precipitaciones del pasado otoño-invierno y a la influencia del poniente y la cercanía al mar.