La Denominación de Origen Rías Baixas está experimentando una transformación significativa gracias a una inversión de casi 7 millones de euros por parte de 24 bodegas, involucrando a expertos en distintos campos de estudio. Los proyectos se centran en el viñedo, la recuperación de variedades autóctonas, el comportamiento de las levaduras autóctonas y la prevención de enfermedades fúngicas. También se investiga sobre la optimización agronómica, la sostenibilidad ambiental y la elaboración de vinos con biotecnología.