Las bodegas buscan alternativas más sostenibles y eficientes para el saneamiento de superficies. El peróxido de hidrógeno surge como una opción prometedora, ya que es efectivo contra microorganismos y se descompone en agua y oxígeno sin dejar residuos. La producción in situ de peróxido de hidrógeno ofrece beneficios como la reducción de riesgos de seguridad y la disminución del consumo de agua y energía. Aunque enfrenta desafíos, esta alternativa se presenta como una opción atractiva frente a los métodos tradicionales.