La producción de uva blanca en Montilla-Moriles ha disminuido un 10% debido a factores climáticos adversos. A pesar de ello, la calidad de la uva cosechada este año ha sido excepcionalmente alta. El precio por kilo de uva ha aumentado un 15% en comparación con el año anterior. Sin embargo, la superficie de viñedo en la región está disminuyendo debido a la preferencia por cultivos más rentables como el olivar.