Bodega Emina y Bodega Matarromera, ubicadas en Castilla y León, reciben la certificación de Producción Integrada, destacando su compromiso con la sostenibilidad y la agricultura regenerativa. Las bodegas se convierten en las primeras de Castilla y León en obtener esta certificación, que implica una transición hacia la producción ecológica y el uso limitado de productos químicos. Emina y Matarromera optimizan sus recursos y emplean técnicas de cultivo que promueven una agricultura sostenible, como el uso de cubiertas vegetales y métodos de control de plagas compatibles con el medio ambiente. La certificación garantiza vinos más saludables para el consumidor y una mayor protección del medio ambiente.