Ramiro Ibáñez, uno de los mayores genios del vino, rescata la historia del vino histórico del Marco de Jerez y recrea su esencia en Caserío de Miraflores Alta, un vino de pasto transparente con aromas de pólvora y una textura pulida. La colección Miraflores Alta muestra la diversidad del pago sanluqueño bajo el prisma de Ibáñez, que hace beber historia sin condenarnos a repetirla.