Cada año después de las fiestas navideñas, miles de árboles de Navidad terminan en los cubos de basura españoles, sin vida más allá que su función decorativa. Bodegas Menade ha puesto en marcha la iniciativa 'Un árbol, un vino' para animar a las familias a llevar el árbol que ya no van a usar a la bodega, a cambio de un vino Menade. Richard Sanz, propietario y enólogo de la bodega, alienta a todo aquel que desee dar una segunda vida a su árbol de Navidad a llevarlo a la Finca Menade, donde se replantará.