La internacionalización se ha convertido en un factor clave para el éxito y supervivencia de las bodegas españolas. Expandir el negocio, aumentar las ventas y ofrecer productos de alta calidad a nivel mundial son elementos fundamentales en el sector vitivinícola. La diversificación de mercados y la búsqueda de talento son estrategias clave para lograr el éxito en la internacionalización. España se posiciona como uno de los principales exportadores de vino en volumen y valor, con destinos como Estados Unidos, Alemania y el Reino Unido. La búsqueda de talento cualificado y la diferenciación basada en calidad y prestigio son fundamentales para posicionar los vinos españoles en el mercado internacional.