La contraetiqueta en una botella de vino es más que un simple elemento decorativo, representa un sello de origen y calidad. La denominación de origen se ha convertido en un pasaporte que valida la autenticidad del producto. La contraetiqueta garantiza que el vino ha pasado por rigurosos controles y proviene de una zona geográfica específica. La comarca vitivinícola Tacoronte-Acentejo utiliza la contraetiqueta como una herramienta esencial para asegurar la procedencia de sus vinos. La contraetiqueta se convierte en un aliado del consumidor, proporcionando la tranquilidad de que está eligiendo un vino genuino, de calidad comprobada y con un origen claro y definido.