La sequía en la DOP Bullas ha reducido la cantidad de la vendimia, pero ha aumentado la calidad de la uva, presagiando una añada de vinos sobresalientes. La sequía ha funcionado como un filtro natural, dejando uvas con un excelente estado de salud. La vendimia de la DOP Bullas es especialmente prolongada, demostrando la resilencia de la región ante los desafíos del cambio climático. La DOP Bullas destaca por la vastedad de su territorio, que actúa como un seguro ante eventos climáticos extremos.