La vendimia en España enfrenta una de sus caídas más drásticas, con una reducción del 9% en la producción, pero la calidad de la uva se mantiene en un nivel alto. Las altas temperaturas y la sequía han llevado a un adelanto en la recogida, pero los expertos creen que esto puede beneficiar la reputación de los vinos españoles. A pesar de las adversidades, la acidez y graduación alcohólica de los vinos son prometedoras. ¡Es un momento clave para apreciar lo que realmente importa en el vino: la calidad sobre la cantidad!