Los acolchados orgánicos en viñedos son una opción ecológica y sostenible para controlar el crecimiento de hierbas no deseadas, reduciéndolo a menos del 30% del suelo. Estos materiales naturales mejoran la calidad del suelo y promueven prácticas agrícolas responsables. Un estudio evaluó la efectividad de diferentes tipos de acolchados orgánicos, como la paja y los restos de poda triturados, y reveló que también fomentan una mayor diversidad de especies beneficiosas para el ecosistema.